SANDRA EN LOS GIRASOLES

“No hay terreno que se le resista. Igual se patea Manhattan que se desliza por un acantilado en Bali para llegar al mejor paisaje. Y con la misma elegancia y seguridad que le dan unos pies que siempre desean subirse a lo más alto. Más que curiosa, de firmes ideas y de acción decidida, conquista por su vitalidad pero también por su mirada valiente, melena intemporal y piel de caramelo”.